La cuenta regresiva hacia las elecciones provinciales del 11 de mayo sigue sumando nombres, apuestas y sorpresas. Una de ellas viene de la mano de un referente conocido por su voz tanto como por su coherencia.
Eduardo Fausto Aukapiña, pionero de la radiofonía salteña, periodista y director de Cadena Global, decidió dar un paso más allá del micrófono: se postula como senador provincial por el departamento La Caldera.
Su candidatura puede parecer inesperada para algunos, pero para quienes lo conocen, era cuestión de tiempo. Conocido por su hombría de bien, su firmeza en los valores cristianos y su compromiso ciudadano, Aukapiña representa esa figura cercana que la gente respeta no por lo que promete, sino por lo que hace.
Radicado en La Caldera –su lugar en el mundo–, el periodista asegura que no viene a hacer política tradicional, sino a recuperar su esencia.
“No soy político de carrera. Vengo del periodismo, de escuchar a la gente, de caminar los barrios y de mirar a los ojos a los vecinos que sienten que ya no hay nadie que los represente.”
Desde esa experiencia acumulada en décadas de comunicación directa con el pueblo, Aukapiña afirma que la política necesita volver a las raíces: el servicio, la verdad, los valores.
“Decidí ser candidato porque creo que la política necesita volver a sus raíces: al servicio, al compromiso con la verdad, al respeto por los valores que fundaron esta Patria. Valores de cuño cristiano, y por qué no, profético, que nos enseñan que lo importante no es lo que se dice, sino lo que se hace. Y que la trayectoria coherente vence al discurso vacío”.
En un escenario donde los slogans abundan y la credibilidad escasea, Aukapiña propone una mirada distinta:
“En un tiempo de promesas huecas y liderazgos de cartón, yo elijo ofrecer lo único que nunca me traicionó: mi compromiso de siempre. El mismo que mantuve en mi profesión, el mismo que practico como ciudadano, y ahora el que asumo como candidato.”
La suya no es una candidatura basada en marketing ni en oportunismo. Es –como él mismo dice– una forma de dar testimonio.
“Porque en medio de la apatía, hace falta audacia. Y no la audacia del marketing, sino la de cargar con la responsabilidad de representar a los demás con dignidad. No vine a improvisar ni a especular. Vine a dar testimonio. Y a recordarnos que aún se puede hacer política con la verdad, con valores y con vocación de servicio.”
