El futuro de Aerolíneas Argentinas podría definirse pronto, luego de intensas negociaciones entre el Gobierno, la empresa, y los gremios aeronáuticos. Tras siete horas de diálogo en la sede de Aeroparque, las partes llegaron a un principio de acuerdo que aún debe ser aprobado por las asambleas de los sindicatos. Este acuerdo temporal permitiría a Aerolíneas continuar sus operaciones, pero su validación plantea pros y contras que impactarían tanto en la empresa como en sus empleados y en el propio Gobierno.

Lo acordado: Reducción de beneficios para mantener la operatividad

En el marco de estas negociaciones, los gremios y Aerolíneas aceptaron eliminar algunos beneficios del Convenio Colectivo de Trabajo, incluyendo el uso de remises, asientos en Clase Business, y ciertos días libres extraordinarios que antes disfrutaban los empleados. Este recorte representa un esfuerzo conjunto para reducir los costos operativos, respondiendo a las presiones del gobierno de Javier Milei, quien busca ajustar el presupuesto de la empresa estatal.

Pros de convalidar el acuerdo

1. Continuidad de los servicios aéreos:
La aprobación del acuerdo permitiría que Aerolíneas Argentinas siga operando, garantizando el acceso a vuelos nacionales e internacionales, lo cual es esencial para muchas regiones del país.

2. Reducción del gasto público:
Si se implementan los recortes de beneficios, el Estado podría ahorrar cerca de $1,000 millones mensuales solo en remises y unos $20,000 millones anuales en pasajes de clase ejecutiva, contribuyendo a un alivio financiero importante.

3. Evitar el Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC):
Con la firma del acuerdo, Aerolíneas evitaría entrar en el PPC, una medida que permite a las empresas en crisis económica negociar suspensiones de personal y menores indemnizaciones. Esto protegería a los trabajadores de reducciones salariales o despidos masivos.

4. Mantenimiento de empleo:
Los ajustes propuestos no contemplan despidos directos, lo que representa un beneficio para los trabajadores de la empresa y sus familias.

Contras de no convalidar el acuerdo

1. Riesgo de cierre de Aerolíneas:
Sin un acuerdo, el Gobierno podría tomar la decisión de cerrar Aerolíneas o avanzar con el PPC, lo que significaría un gran impacto en los empleados y en la conectividad del país.

2. Reducción de derechos laborales y beneficios:
El acuerdo implica la pérdida de ciertos beneficios, lo que podría afectar la satisfacción y condiciones de trabajo de los empleados, especialmente aquellos en roles operativos que dependían de los remises y otros beneficios.

3. Aumento de la tensión con el Gobierno:
El presidente Milei ya ha mostrado una postura firme en cuanto a la necesidad de modificar los convenios colectivos. La falta de aprobación del acuerdo podría intensificar la presión del Gobierno para imponer recortes más duros, afectando aún más los derechos laborales.

4. Efecto sobre la productividad y la moral laboral:
La eliminación de algunos beneficios, aunque reduce costos, podría tener un efecto negativo en la moral de los empleados, lo que podría afectar la productividad y la eficiencia operativa en el largo plazo.

¿Qué sigue?

Los sindicatos han presentado sus propias propuestas para mejorar la productividad sin eliminar todos los beneficios. Los funcionarios del Gobierno se comprometieron a evaluar estas propuestas y dar una respuesta definitiva el lunes. Si el acuerdo satisface las expectativas del Ejecutivo, se avanzará en su implementación. En caso contrario, el Gobierno podría acelerar una decisión drástica sobre el futuro de Aerolíneas Argentinas.

La aprobación de este acuerdo representa una alternativa viable para que la aerolínea de bandera continúe operando y mantenga el servicio aéreo en el país, aunque con ciertas concesiones. Sin embargo, si no se convalida, se avecinan grandes desafíos para la empresa, los empleados y el sistema de transporte aéreo argentino en su conjunto.